Con una acción de gracias, todos los años nuestro colegio conmemora un año más de vida en septiembre. Y en el fondo lo hacemos para agradecer a Dios la valentía y coraje de tantas mujeres que decidieron servir a la iglesia desde la educación. En tiempos antiguos, era otra la instrucción, ciertamente, pero con el transcurso de los años las hermanas de la congregación también han sabido responder a los signos de los tiempos.
Así, la mañana de este viernes 6 de septiembre comenzó con una capilla colorida por nuestros estudiantes de prekínder a 6º básico. Entre los disfraces temáticos y la decoración de la capilla, fue un espacio hermoso preparado con mucho cariño, para dar gracias por esta historia que ya tiene 183 años.
Un poco más tarde, el resto del colegio tuvo una eucaristía presidida por Claudio Carrasco ss.cc. quien centró su homilía en el poder trasformador del amor, que es lo que sustenta nuestra congregación dedicada a los Sagrados Corazones de Jesús y de María. “El amor transforma al mundo, y no es un valor exclusivo de la fe, es de todo el mundo, pero quienes seguimos a Jesús tenemos el deber de intentar amar a todos y cambiar las cosas”, dijo el padre Claudio.
En la acción de gracias, Juliana Portillo, presidenta del Cal, dio gracias por la sana convivencia en la semana aniversario, que va forjando identidad y cariño por los Sagrados Corazones. En tanto, la directora Gloria Rojas, también agradeció a quienes desde hace 183 años han contribuido para que en esta historia se continúe formando ciudadanas y ciudadanos para el mundo.
Luego de estos momentos de oración y gratitud la semana del colegio siguió su curso con alegría, cariño y fiesta. Al terminar la jornada, todo el personal del colegio celebró el aniversario con un rico almuerzo organizado por las hermanas, donde primó la fraternidad y el encuentro.