Cada año, las clausuras involucran un esfuerzo mancomunado de profesores y estudiantes. Es el último esfuerzo o el último suspiro antes de iniciar el urgente descanso que tanto nos viene bien a quienes estamos alrededor del mundo de la educación. Esta semana vivimos las clausura de los 3 ciclos el lunes 11, martes 12 y miércoles 13 de diciembre en la mañana. El tema central que se intencionó en ellas fue la inclusión, una de las metas importantes de nuestra comunidad educativa y que estamos trabajando para lograr, pero entendida como lo que el concepto quiere decir en su amplitud; todos somos diferentes, únicos e irrepetibles y por lo tanto amados a los ojos de Dios.
Por ello, en los actos de cierre del año escolar, nuestros apoderados pudieron disfrutar de bailes y cantos realizados por nuestros estudiantes que apuntaban a este valor, y también se reconocieron sus esfuerzos y éxitos en los ámbitos académico, deportivo y valórico. Nuestros estudiantes de cuarto básico y octavo básico, que demostraron su adhesión a los valores de nuestra Congregación, recibieron la medalla Padre Damián y Virgen de la Paz, respectivamente.
Cada curso eligió al o los compañeros que acogen y ayudan a los demás, dándoles el premio a la fraternidad. También fueron premiados los logros académicos, para aquellos estudiantes que obtuvieron los mejores promedios anuales, así como de excelencia académica a los mejores promedios por ciclo. Asimismo, los triunfos deportivos, que fueron muchos, fueron reconocidos y sus copas entregadas a nuestra directora, quien, en sus palabras, destacó el esfuerzo, perseverancia y logros de nuestros estudiantes.
Fue hermoso poder reunirnos nuevamente para celebrar y recordar que somos una comunidad que trabaja unida y que busca siempre incluir y promover la diversidad.
¡Les deseamos una feliz Navidad y un próspero 2024!
